Cómo Proteger a las Lagartijas
Las lagartijas son una especie importante debido a su papel como controladores de insectos. Estos animales tienen el potencial de reducir la presión de los insectos donde viven. Una forma en que podemos ayudar a preservar este hermoso animal es siendo conscientes del detrimento que los humanos estamos causando a su hábitat.
Aquí están algunas maneras simples de proteger las lagartijas:
- Sea consciente de la vida silvestre cuando se jardina: los reas naturales y el hábitat de estos animales tienen que sufrir altas temperaturas para mantenerse. Si está trabajando en el jardín, evite usar pesticidas y fertilizantes. Estos productos químicos son perjudiciales para la salud de cualquier criatura con la que uno pueda entrar en contacto.
- No retire los nidos de lagartijas: muchas personas piensan que los nidos de lagartijas están vacíos, y deciden quitarlos para obtener un espacio adicional para sus plantas. Sin embargo, esto puede afectar la población local de lagartijas. Estos animales usan los nidos como lugar para descansar, alimentarse y dar a luz a sus crías.
- Mantenga un patrón demotado adecuado: eliminar la maleza de los terrenos cercanos a la casa ayudará a los insectos que sirven como alimento para las lagartijas. Deja al menos algunos terrenos sin corte cerca de tu lugar de residencia para crear un hábitat para las lagartijas.
Asegurar el hábitat de las lagartijas es clave para preservar esta preciada especie. Los humanos no deberíamos ignorar la cantidad de problemas que enfrentan estos animales. Si se siguen estos pasos sencillos y se conservan sus hábitats, los humanos pueden proteger a las lagartijas y ayudarlas a conservar la diversidad de insectos en la naturaleza.
¿Por qué las lagartijas están en peligro de extinción?
El estudio encuentra que las lagartijas se están extinguiendo localmente a nivel mundial debido exclusivamente a que la temperatura está subiendo. Los investigadores concluyeron que el cambio climático podría llevar al 20 por ciento de las lagartijas del mundo a extinguirse en los próximos 70 años. Esto se debe a que el calentamiento global ha ampliado la zona de hogar de algunas especies de lagartijas, lo que significa que algunas pueden estar compitiendo con otras especies invasoras para los recursos. El calentamiento también reduce los patrones de precipitaciones, lo que significa que los hábitats que las lagartijas históricamente usaban como hogar ya no serán viables. Esto provoca que algunas especies se extingan localmente, con el agravante de que el calentamiento global también aumenta el riesgo de enfermedades para estas criaturas.
¿Cómo podemos cuidar a las lagartijas?
En primer lugar, es recomendable comprar la lagartija en un local establecido de venta de mascotas, puesto que estos reptiles son muy sensibles a los cambios y pueden morir en el caso de que lo saques tú mismo de su hábitat natural. Incluso, se entristecen cuando no se acostumbran a su nuevo hogar.
Además, una buena alimentación también es clave para cuidar de tu lagartija. Puede alimentarlos cada dos o tres días con una mezcla de frutas, verduras y algunos insectos. Por otro lado, es importante proporcionarles una temperatura adecuada. Deben tener una temperatura alta durante el día, y una temperatura ligeramente más baja durante la noche, para que puedan descansar bien.
También es necesario limpiar la jaula para deshacerse de los desechos de tu lagartija, ya que esto puede provocar una infestación de parásitos. Así mismo, asegúrate de lavar y desinfectar la jaula al menos una vez al mes con un desinfectante para animales. Finalmente, debes llevar a tu lagartija al veterinario una o dos veces al año para hacerle un chequeo general y descartar posibles enfermedades.
¿Cómo se protege el lagarto?
La autotomía caudal es un comportamiento de defensa frente a los depredadores muy extendido en los lagartos y en algunas serpientes. La pérdida de la cola es un mecanismo antidepredador eficaz que incrementa la supervivencia de las lagartijas en sus encuentros con todo tipo de depredadores. Esta caída voluntaria se desencadena cuando el animal se siente amenazado. El lagarto no solo se defiende con la autotomía caudal, también hace uso de ciertas señales de alarma para intentar espantar al depredador, tales como saltar, cambiar de color, erizar los pelos de la cola, abrir la boca y mostrar los dientes, etc. También usan mecanismos de defensa como esconderse en madrigueras debajo de las rocas o entre la maleza. Algunos lagartos se hacen grandes para intimidar a sus depredadores, mostrando su gran tamaño. El camuflaje también juega un papel importante para la protección del lagarto. La mayoría de los lagartos cambian de color para ajustarse al medio ambiente, haciéndolos mucho más difíciles de detectar.