¿Cómo preparar el aceite de lavanda?
El aceite de lavanda es un aceite esencial que se usa frecuentemente en la aromaterapia para su aroma calmante y relajante. Se puede usar para una variedad de fines terapéuticos, desde la relajación de los músculos hasta el alivio de la ansiedad. Si bien el aceite de lavanda generalmente se compra hecho, prepararlo puede ser un proyecto divertido e incluso útil. ¡Te explicaremos cómo hacerlo aquí!
Ingredientes
- Lavanda fresca
- Aceite de almendras, oliva u aceite mineral
- Mortero y mano de mano
- Tocino de cera
- Papel de filtro
- Bote
Instrucciones
- Reúna los ingredientes. Reúna todos los ingredientes en un lugar fresco y oscuro. Esto te ayudará a mantener cualquier aceite esencial que quieras añadir más tarde.
- Corta las flores para liberar los aceites. Use las tijeras para cortar las flores a la mitad. Esto ayuda a liberar los aceites en el interior, aumentando el aroma de la lavanda.
- Muele las flores. Coloque las flores trituradas en un mortero y use una mano de madera para triturarlas todavía más. Esto ayuda a liberar más aceite.
- Añada el aceite de base. Coloque las flores trituradas en un frasco limpio y seguro y añada su aceite de base. Aceite de almendras, oliva y mineral son buenas opciones.
- Añade aceite esencial. Si deseas reforzar el aroma de la lavanda, puedes añadir algunas gotas de aceite esencial de lavanda. Esto ayudará a darle el aroma único de la lavanda.
- Tapa herméticamente el frasco. Utilice la tapa para sellar el frasco, para evitar que el aceite se eche a perder.
- Agregue una placa de cera. Para evitar que el aceite se filtre de la botella parcialmente abierta, agregue una placa de cera al frasco. Esto ayudará a sellar el frasco aún más.
- Deje reposar el aceite. Deje que el aceite se infunda durante dos semanas en un lugar oscuro y fresco.
- Filtre el aceite. Después de dos semanas, use un papel de filtro para filtrar el aceite.
- Almacene el aceite. Guarde el aceite en un frasco oscuro y seguro para evitar que se deteriore.
Conclusión
Así es cómo se prepara el aceite de lavanda en casa. Aunque la preparación puede ser un proceso largo e intensivo, el aceite casero puede ser un producto útil que se puede usar de muchas maneras diferentes. ¡Esperamos que esto te ayude a aprender cómo hacer tu propio aceite de lavanda!
¿Cómo se obtiene el aceite esencial de lavanda?
El aceite esencial de Lavanda se obtiene por arrastre de vapor de la planta de Lavándula Angustifolia. Esta planta se distribuye por toda la cuenca mediterránea de manera salvaje. En la actualidad hay numerosos paises donde se cultiva la lavanda de forma intensiva, para su posterior extracción de su aceite esencial. La extracción del aceite esencial se realiza introduciendo ramas de la planta en un recipiente de acero inoxidable, cuya tapa se cierra herméticamente. Esto se conecta a un condensador por donde se descargan los vapores del aceite esencial. Estos vapores se condensan recibiendo el nombre de aceite esencial de Lavanda.
¿Cómo se puede preparar la lavanda?
Preparación de la infusión de lavanda El procedimiento es muy sencillo: sumerge varias flores secas de lavanda en agua hirviendo, deja reposar durante unos 10 minutos, cuela y sirve. Puedes consumirla tanto fría como caliente.
También puedes preparar un té de lavanda usando una taza de agua hirviendo que deberás agregar a una cucharadita de flores de lavanda secas. Deja reposar durante unos 10 minutos, cuela y listo. Puedes agregar un toque de miel para darle un poco de sabor.
¿Qué se puede hacer con aceite esencial de lavanda?
Usos del aceite de lavanda El aceite esencial de lavanda se puede usar puro, como elemento aromatizante en productos como ambientadores o puede añadirse a productos de limpieza, Unas gotas de aceite de lavanda puro proporcionan un aroma primaveral a las cremas, lociones corporales o sales de baño caseras . El aceite esencial de lavanda también se puede usar como repelente natural para insectos y como un relajante muscular y mental. Las hojas de lavanda se pueden agregar a alimentos y bebidas para agregar un ligero sabor a hierbas a muchos platos, como una alternativa natural al uso de comestibles aromatizados con sabor a lavanda.