¿Cómo usar una almohada cervical?
Las almohadas cervicales están diseñadas para ayudar a proporcionar alivio y soporte a los usuarios que sufren de dolor de cuello y de espalda. Si has estado pensando en usar una almohada cervical, aquí hay algunas sugerencias para usarla correctamente.
1. Elija la almohada correcta para usted
No todas las almohadas cervicales son ideales para todas las personas y todos los casos de dolor cervical. Si sufre de dolor cervical crónico, debe consultar primero a un médico antes de elegir una almohada cervical particular para él.
2. Asegúrese de reglar la almohada correctamente
Una vez que haya elegido su almohada adecuada, asegúrese de ajustarla correctamente para que se ajuste a sus necesidades. Las almohadas de cuello vienen con ajustes que le permiten cambiar la dureza de la almohada. Asegúrese de encontrar una almohada lo suficientemente suave para brindar soporte, pero también duradera para proporcionar alivio a largo plazo.
3. Haga cambios si el alivio no es suficiente
Si no está satisfecho con los resultados de su almohada cervical después de algunos días de uso, intente cambiar la posición de la almohada o el nivel de suavidad. Si los cambios no proporcionan el alivio requerido, busque un asesoramiento médico.
4. Limpie y mantenga su almohada
Asegúrese de limpiar la almohada periódicamente para mantener la higiene. Consulte las instrucciones del fabricante para personalizar la limpieza según el material de la almohada. Si tiene manchas resistentes, lave la almohada en la lavadora con un ciclo delicado.
- Para el mejor cuidado de su almohada cervical, recuerde:
- Consulte a un profesional de la salud antes de comprar su almohada.
- Encontrar la almohada correcta para sus necesidades.
- Ajustar la almohada correctamente.
- Haga cambios si el alivio no es suficiente.
- Limpie y mantenga la almohada.
¿Cómo poner la almohada para que no duela el cuello?
Coloca una almohada entre las rodillas: Colocar la almohada entre las rodillas resulta de gran ayuda para adoptar la postura correcta, lo que te prevendrá de sufrir dolores en el cuello, pero también a descansar mejor cuando duermas de costado.
Cómo Usar una Almohada Cervical
Las almohadas cervicales son un recurso muy útil para aliviar el dolor en la espalda y para proporcionar una postura correcta cuando estás acostado. Estas almohadas suavemente soportan tu cuello y la parte posterior de tu cabeza mientras duermes. A continuación, te mostramos una descripción de los pasos para utilizar una almohada cervical.
Pasos Para Utilizar una Almohada Cervical:
- Escoge una almohada cervical que se ajuste a tus necesidades. Las almohadas cervicales comúnmente están hechas de látex, espuma de memoria o plumas. Elige un material que sea cómodo para ti.
- Coloca la almohada en una posición en la cual tu cuello quede relajado y alineado con tu cuerpo. La almohada debe estar entre tu cabeza y el colchón, y solo debe elevar tu cabeza unos 5 cm aproximadamente del colchón.
- Asegúrate de que tu almohada esté en la posición correcta para dormir. Si deseas dormir boca arriba, la almohada debe estar debajo de tus hombros para mejorar la curvatura natural de tu columna y de esta forma prevenir el dolor en la espalda.
- Si deseas dormir de lado, el cuello debe estar alineado con conforme al resto de tu cuerpo, con lo que la almohada debe ser menos alta que cuando duermes boca arriba. La almohada debe estar entre tus hombros y la cabeza.
- Para quienes duermen boca abajo, la recomendación común es que se dispense de la almohada cervical. Si decides usarla algunas veces, se recomienda una almohada baja y no muy firme.
En conclusión, recuerda que una almohada cervical debe adaptarse a tus necesidades. Es importante que el cuello esté bien alineado con tu cuerpo cuando estés acostado. Siempre que puedas, toma en cuenta estos consejos para una posición cómoda.
¿Cuál es la posición correcta de una almohada cervical?
Por un lado, el área curvada de la almohada cervical tiene que estar en contacto permanente con el cuello para que esté alineado con la columna vertebral durante la noche. Por otro lado, la zona plana de la almohada es donde colocamos la cabeza. Finalmente, los hombros se apoyan sobre el colchón. Se debe mantener la misma posición durante el tiempo que se necesita para dormir. La altura de la almohada debe ajustarse según la forma de dormir: cambia si se alternan entre dos posiciones.