Cómo afeitarse con navaja
Afeitarse con una navaja es una práctica milenaria que, además de ser una alternativa a los métodos de afeitado más modernos, aporta beneficios interesantes para la salud de la piel. Si bien se requiere un periodo de adaptación para encontrar la mejor forma de usarla, una vez que hayas dominado la técnica, verás por qué cada vez más personas optan por afeitarse con ella.
Cómo afeitarse con navaja
- Utiliza productos preparatorios:Es fundamental que antes de afeitarte prepares la piel con los productos adecuados. Usa una pasta de afeitar para humectar tu piel y ablandar el vello. De preferencia usa una sustancia natural para preparar el rostro.
- Retoque el filo de la navaja: Verifica que esté perfectamente filada, de lo contrario podría ocasionarte heridas graves.
- Aplica la navaja con suavidad: No debes apretar demasiado la navaja, sostenla ligeramente con la mano y empieza el afeitado en dirección contraria al crecimiento del pelo.
- Termina con una crema hidratante:Una vez que hayas terminado afeitarte con la navaja, aplica una crema hidratante para suavizar la piel y prevenir irritación.
Recuerda que de la misma forma que hay reglas para aprender a afeitarte con una navaja, hay que respetar los cuidados de higiene al manipularla. Lávala con agua fría y sécala bien con un paño antes de usarla.
¿Qué se necesita para afeitarse con navaja?
El afeitado con navaja requiere de aceite preafeitado para preparar la piel y gel o crema de afeitar en todo momento a fin de evitar posibles irritaciones. Una vez preparada la piel se necesita una navaja, preferiblemente con un filo afilado. Se recomienda también una servilleta de lavado y, como último paso, suavizar la piel con loción para después de afeitar. Por supuesto, también recomendamos el uso de un espejo para ver correctamente la zona a afeitar.
¿Qué es mejor afeitarse con cuchilla o navaja?
1-Se obtiene un mejor afeitado Que los barberos usen navaja de afeitar en vez de cuchillas dice mucho del resultado. Evidentemente, la navaja consigue un afeitado más suave y rasurado, pues corta los pelos desde su salida, sin que sean visibles en el exterior de la piel. Esto es ideal para aquellos que quieren un acabado perfecto y profesional. Por otro lado, la cuchilla es mucho más fácil y rápida, una buena opción para aquellos que no tienen mucho tiempo para rasurarse. Es más sencilla de usar y no tiene el pretendido acabado que puedas obtener con la navaja.
¿Cómo afeitarse bien con navaja?
Mantén un agarre firme, ajustándolo para las diferentes partes de la cara, como el labio superior y la mandíbula. la clave está en tensar la piel con la otra mano (o tensando el cuello) y aplicando presión con la navaja, suavemente. Así no te cortarás la cara ni el dedo. Trabaja en dirección opuesta a los pelos. Utiliza siempre navajas afiladas y recuerda reemplazarlas regularmente. Termina el afeitado con una loción hidratante para evitar resequedad y enrojecimiento.
¿Cómo usar la navaja para principiantes?
COMO USAR LA NAVAJA DE BARBERIA O RASURADORA
1. Prepare el área de trabajo: siempre intente trabajar en un área limpia y despejada. Además, asegúrese de que tenga los suministros necesarios a mano antes de comenzar, como toallas limpias, esponjas y crema para afeitar.
2. Lubrica la piel antes de comenzar: asegúrate de que la piel esté ligeramente humedecida y lubricada con gel de afeitar. Esto ayudará a evitar que la piel se arranque o se irrite mientras se afeita.
3. Sostener la navaja de forma segura: sostenga la navaja con la mano dominante, doblando los dedos hacia el mango y usando el pulgar para mantener el filo lejos de la piel. Al sujetar la navaja con firmeza, también deberías sentir un leve tintineo.
4. Afeitar con la navaja: empuje la navaja suavemente sobre la piel, con un movimiento lateral y uniforme. Puedes probar con movimientos ondulantes, horizontales o verticales, según cómo se sienta más cómodo. Siempre mantén el filo lejos de la piel al cambiar de dirección.
5. Repetir en áreas difíciles: si hay áreas difíciles de afeitar, trabaja a velocidades más lentas y más bajas para obtener el máximo control. Revisa detenidamente la piel después de afeitar para controlar los cortes y rasguños.
6. Lávate la cara después de afeitar: siempre lavar suavemente la piel con agua y jabón suave después de afeitar con un rasurador o navaja. Esto te ayudará a limpiar y calmar la piel, además de eliminar cualquier irritación residual.