Cómo dormir para evitar el reflujo
El reflujo ácido es una afección caracterizada por la recurrencia de la acidez estomacal. Estos síntomas son más frecuentes durante la noche y pueden interferir con la calidad del sueño. Afortunadamente, existen cambios en la posición del sueño que pueden ayudar a reducir los efectos del reflujo.
Consejos para reducir el reflujo
- Elevar la cabeza de la cama. Coloque un par de almohadas debajo de su cabecera para elevarla en una posición más inclinada. Esto ayudará a mantener el ácido estomacal en el estómago.
- Evite comer demasiado tarde por la noche. Deje un lapso de tiempo entre su última comida y la hora de acostarse.
- Reducir el estrés. El estrés puede aumentar los síntomas del reflujo. Procure aliviar los niveles de ansiedad mediante relajación.
- No cuente con el soporte extra de la almohada. La espuma y los contornos suelen forzar la columna vertebral hacia una posición desviada, lo que podría aumentar los síntomas de reflujo.
- Mantenga una buena higiene. Lave la ropa de cama con frecuencia para reducir los ácaros y las bacterias del aire.
- Un descanso reparador. Es importante descansar al menos ocho horas para recargar energías.
Si sigue estas pautas, logrará un descanso reparador y disminuirá los síntomas del reflujo. Recuerde nunca dar por hecho que los síntomas son causados únicamente por reflujo; en caso de persistir su malestar, consulte siempre con su médico de cabecera.
¿Cómo aliviar el reflujo nocturno remedios caseros?
Remedios naturales para el reflujo gástrico Dejar de fumar, Técnicas calmantes, Evitar los ingredientes desencadenantes, Incorporar jengibre en la dieta, Comer más temprano, Mantener un peso moderado, Masticar goma de mascar sin azúcar después de las comidas, Usar ropa menos ajustada
Cómo Prevenir el Reflujo Ácido
Cambios en su Posición de Descanso
La forma en que se acuesta puede contribuir a prevenir el reflujo ácido. Estos cambios para su posición de descanso pueden ayudar a prevenir que el ácido del estómago se suba a la garganta:
- Durma en un equipo soporte. Coloque una almohada debajo de la parte superior de la cama para inclinar su colchón y los pies hacia arriba. Esto ayudará a mantener sus órganos digestivos en la posición correcta para impedir que el ácido del estómago salga.
- Durma con sus cabezas levantadas. Añada un cojín extra a la parte superior de su almohada para levantar su cabeza y el cuello para mantener la gravedad ayudándoles a que el ácido del estómago no se suba.
- Durma a los lados. Dormir sobre su lado derecho puede reducir el reflujo ácido.
Evite los Alimentos Desencadenantes
Algunos alimentos y bebidas pueden desencadenar el reflujo ácido. Estos alimentos y bebidas pueden aumentar la acidez del estómago y empujar el ácido hasta la garganta. Evite los alimentos y bebidas que causen reflujo ácido (como café, alcohol y alimentos condimentados).
Establezca un Horario de Alimentación
Evite los atracones, coma en platos pequeños y coma varias veces al día en lugar de 3 comidas grandes al día. Esto le ayudará a mantener un peso saludable que puede contribuir a reducir el reflujo ácido. Divida el almuerzo y la cena en dos comidas más pequeñas al día.
¿Cómo evitar el reflujo por la noche?
Consejos Evitar acostarse después de las comidas, por lo menos hasta que hayan pasado unas 2 horas desde la ingesta, Elevar la cabecera de la cama, unos 10-15 cm, No coloque almohadas, porque solamente consiguen flexionar el cuello, No usar prendas ajustadas, No realizar comidas muy abundantes, Controlar el sobrepeso y la obesidad, Evitar los alimentos y bebidas ácidos, como el café, té, refrescos y bebidas alcohólicas, y Evitar los alimentos grasos, fritos y picantes justo antes de acostarse.
Cómo dormir para evitar el reflujo
El reflujo es una condición dolorosa causada por la subida de ácido estomacal hasta la garganta. El reflujo puede ser una preocupación crónica, pero hay ciertas medidas que puede adoptar para minimizar los síntomas al acostarse. Aquí hay algunas formas de controlar el reflujo mientras duerme.
Coma por lo menos dos horas antes de acostarse
Evite comer comidas grandes y grasosas justo antes de acostarse. Cuanto más tiempo se tarde en acostarse después de ingerir una comida, menor será el riesgo de reflujo. Comer dos o tres horas antes del acostamiento puede ser una buena medida para evitar el reflujo al dormir.
Cambie su postura al dormir
Durante el reposo nocturno, duerma con la cabeza y el tronco elevados. Use unos almohadones para proporcionar a su cuerpo la postura correcta. Puede colocar entre uno y dos almohadones debajo de sus hombros para evitar que el ácido estomacal se suba a su garganta. Es importante recordar que el tamaño del almohadón para conseguir la posición adecuada.
Beber líquidos con moderación
Los líquidos pueden desencadenar el reflujo. Por lo tanto, es importante beber con moderación. Evite bebidas carbonatadas o ácidas. Además, beba unas dos horas antes de acostarse para disminuir el reflujo nocturno.
Mantenga un horario regular para acostarse
Intente mantener un horario regular para acostarse. Se recomienda acostarse entre las 10 p.m. y las 11 p.m. para que su cuerpo se recupere de la jornada y pueda descansar adecuadamente. Es importante tratar de llevar este horario regular cada noche.
Cambie su dieta
Una dieta saludable y equilibrada puede ayudar a reducir los síntomas de reflujo. Esto significa comer alimentos ricos en fibra y que no sean grasosos. Algunos alimentos saludables incluyen frutas y verduras frescas, cereales integrales y lácteos bajos en grasa. Estos alimentos actúan como protección contra el reflujo.
Considere tomar medicamentos
Si los cambios en la dieta y los cambios de estilo de vida no proporcionan alivio de los síntomas, consulte a su médico para determinar si un medicamento para el reflujo es necesario. Examinará sus síntomas y le recomendará el medicamento más adecuado para su condición.
Conclusion
El reflujo es un trastorno doloroso que puede convertirse en una afección crónica si no se trata adecuadamente. Existen ciertas medidas que se pueden tomar para reducir el reflujo al acostarse, como evitar comer cerca de la hora de acostarse, cambiar la posición para dormir, ser moderado al beber líquidos y mantener un horario regular para acostarse. Si los cambios en la dieta y el estilo de vida no alivian los síntomas, hable con su médico para decidir si necesita un tratamiento farmacológico.