Cómo Hacer Un Fular Rígido
Un fular rígido es una alternativa cada vez más popular al amamantamiento tradicional. Esta forma de llevar a tu bebé se cree que mejora la postura de la espalda, promueve un vínculo más cercano entre el padre y el bebé, y es una manera más fácil de llevar a tu bebé. Esta guía te mostrará cada paso para hacer tu propio fular rígido.
Lo Que Necesitarás
- Tela: Se recomienda una tela resistente de algodón o mezcla de algodón.
- Aguja e hilo: Se recomienda una aguja para almohadilla y un hilo de algodón.
- Tijeras: Un par de tijeras nuevas.
- Botones forrados: Usa este botón para cerrar el fular. Si prefieres una abertura completa, puedes saltarte este paso.
Cómo Hacerlo
- Corta la tela en rectángulos. El tamaño depende de tu edad, altura y estatura, pero como guía general, el rectángulo debe medir alrededor de 25 cm de ancho y 70 cm de largo.
- Doblar los bordes 1/2 pulgada hacia el lado equivocado y coser el borde. Esto hará que los bordes sean más fuertes.
- Ahora doblar los dos rectángulos a la mitad lado derecho en lado derecho. Haciendo que los bordes de alrededor de 12 pulgadas se extiendan más allá en cada lado.
- Une los dos rectángulos a lo largo de los bordes.
- Cuando hayas cosido los dos rectángulos, doblar los laterales hacia el centro para formar un bucle.
- Coser los bordes de los bucles juntos.
- Si deseas que el fular esté cerrado, adhiéreselos al centro con un botón forrado.
- Tu fular está listo para usar.
A continuación, un vídeo para ayudarte a construir tu fular paso a paso:
Ahora, con estos sencillos pasos y un poco de creatividad, ya puedes hacer tu propio fular rígido. ¡Disfrútalo!
¿Qué tipo de tela se usa para hacer un fular?
el grosor y la composición de la tela son un factor importante a la hora de elegir. La mayoría de los fulares elásticos tienen un amplio porcentaje de algodón y algo de elastano. También hay algunos con bambú, que por sus propiedades antitérmicas y gran transpirabilidad son ideales para verano o climas calurosos. Otras telas naturales como lana merina, seda o lino ofrecen resistencia e incluso en invierno.
¿Cómo hacer un fular en casa?
COMO HACER UN FULAR PASO A PASO – YouTube
Para hacer un fular en casa, tendrás que recopilar los siguientes materiales:
– Tela o telas a tu gusto
-Hilo para bordar (opcional)
-Aguja
-Tesa o cinta adhesiva
PASO 1: Elige el tamaño y la tela deseados para tu fular.
PASO 2: Corta dos rectángulos de tela de la misma medida.
PASO 3: Coloca los dos rectángulos de tela sobre una superficie plana con los lados derechos enfrentados y coselos alrededor de los tres lados (3 lados abiertos) con un punto recto. Puedes hacer un modelo con el hilo para dar un toque diferente a tu fular.
PASO 4: Dorso uno de los lados abiertos con una tela más gruesa para hacer el dobladillo.
PASO 5: A continuación, dobladillo el segundo lado abierto de la misma forma.
PASO 6: Transfiere los extremos rectangulares (el lado más largo) para que queden a la misma altura. Utiliza una tes o cinta adhesiva para mantener ambos bordes a la misma altura.
PASO 7: Ve dando vueltas a la tela para formar el fular. Cose los bordes para que queden bien sujetos.
¡Y Ya lo tienes! Ahora solo tienes que diseñar tu fular para personalizarlo y usarlo como quieras.
¿Qué es mejor fular elástico o rígido?
El fular semielástico (llamado también híbrido) tiene mayor rigidez que el fular elástico, pero es menos rígido que el fular tejido. Admite algunas otras posiciones, y dependiendo de su composición, puede utilizarse desde el nacimiento, hasta que el bebé adquiera un peso mayor, unos 15 kg aproximadamente, o más.
En cuanto a comodidad, el fular elástico es muy cómodo para los padres y para el bebé, puesto que el material es muy elástico, permitiendo una adaptación perfecta a la anatomía de ambos. El fular rígido por su parte es menos cómodo, a no ser que esté confeccionado en un material suave, ya que el tejido es más resistente, pero siempre será menos elástico que el fular elástico.
En definitiva, el fular elástico tiende a ser más cómodo en comparación con el fular rígido, aunque hay muchos factores que deben tenerse en cuenta al elegir uno u otro, como la calidad del material, el tamaño del bebé y el uso que se le va a dar. Si te decides a comprar uno, elige el que mejor se adapte a la forma de tu cuerpo y a tu bebé, para que disfrutéis al máximo de todos los beneficios que os ofrece llevarlo puesto.