Cómo borrar un tatuaje recién hecho
Paso 1: Consigue los Materiales Correctos
Si quieres borrar tu tatuaje recién hecho, necesitarás los siguientes materiales:
- Jabón para lavar la zona con una esponja suave
- Unguento antibiótico para prevenir infecciones
- Gasas de algodón para colocar en la zona expuesta
- Hilo para evitar que se formen hematomas en la zona
Paso 2: Lava Bien el Tatuaje
Lava bien la zona con agua tibia y jabón con la ayuda de una esponja suave. Busca que no haya restos de tinta y que la zona esté limpia por completo.
Paso 3: Aplica el Ungüento
A continuación, aplica una capa de ungüento antibiótico para prevenir la posibilidad de infecciones. El unguento también ayudará a regenerar la piel y curar la herida.
Paso 4: Cubre el Tatuaje
Utiliza gasas de algodón para cubrir el tatuaje recién hecho. Esto está hecho para evitar contacto directo con la ropa y también asegurar la cicatrización de la herida.
Paso 5: Remata Con Hilo de Coser
Por último, usa un hilo de coser para rematar la zona. Esto hará que create una barrera entre la herida y la piel alrededor. Esto también ayudará a evitar hematomas.
¿Cómo eliminar un tatuaje con agua oxigenada?
En un disco de algodón, vierte agua oxigenada y limpia la zona diariamente. Es la más lento de las tres opciones. Aunque notarás el dibujo cada vez más suave y las líneas se irán borrando, tendrás que saber que no es definitivo. Esta técnica es la menos invasiva y la más baja en riesgos.
¿Cómo se llama la crema para quitar tatuajes?
Cremas con Ácido Tricloroacético ( TCA ): Es uno de los compuestos más conocidos entre estas cremas para eliminar tatuajes. Esta crema lo que hacer es causar un blanqueamiento en la zona del tatuaje, por lo que es muy importante que sea vigilado de cerca cuando la utilizamos. Otras opciones para eliminar un tatuaje son los láseres o el ácido úrico.
¿Por qué se borra un tatuaje recién hecho?
Los motivos de esperar para borrar tatuajes son principalmente dos. En primer lugar, la piel necesita tiempo para regenerarse tras el proceso de realización del tatuaje. En segundo lugar, lo recomendable es esperar un tiempo hasta que nuestro sistema linfático encapsule la tinta que ha entrado en nuestro cuerpo. Esto se debe a que algunas técnicas de borrado, como la láser, pueden causar que algunas partículas de la tinta sean absorbidas por nuestro cuerpo a través del proceso de cicatrización de la piel, lo cual puede causar efectos secundarios a largo plazo.
Cómo Borrar un Tatuaje Recién Hecho
¿Es posible?
Es posible borrar un tatuaje recién hecho aunque hay algunos métodos que se recomiendan para un óptimo resultado. Todos los métodos producirán cicatrización, en mayor o menor medida. Lo mejor es consultar con un médico de confianza, antes de tomar una decisión de qué método utilizar.
Métodos para Borrar un Tatuaje Recién Hecho
- Quirúrgico: La solución quirúrgica más segura, es también la más costosa. La operación consiste en eliminar la piel tatuada y suturar la zona. El riesgo de complicaciones es mínimo, pero los costos y el tiempo de recuperación son considerables.
- Láser: Este método se considera el más seguro y menos invasivo. El láser desvanece gradualmente el pigmento del tatuaje, sin dañar la piel alrededor. La sesión se puede retomar en caso de que el tratamiento no arroje los resultados deseados.
- Cremas quita-tatuajes: Se les considera menos efectivas que los láser, pero los costos de cremas especializadas son significativamente menores. No deben usarse productos caseros, pues podrían producir infecciones y complicaciones.
¿Qué tomar en cuenta?
- En cualquiera de los casos mencionados, el resultado final del tratamiento puede no ser el esperado.
- No se recomienda borrar un tatuaje recién hecho por un periodo de al menos dos meses.
- Se recomienda evitar exponer la zona a la luz del sol al menos durante el tratamiento.
- Es importante verificar la reputación del profesional donde se vaya a realizar el tratamiento.
Es esencial mantener una comunicación abierta con el médico tratante para conocer los pros y contras de cada opción de tratamiento y tomar una decisión informada. De esta forma se garantiza un tratamiento de calidad que sea adecuado para la situación, así como para el paciente.