Cómo Cultivar Mota
1. Escoge la variedad apropiada
En primer lugar, necesitas elegir la variedad adecuada para tu cultivo. Existen una gran variedad de diferentes variedades de Cannabis, algunas de las cuales son más adecuadas para la producción de marihuana con fines médicos, mientras que otras son mejores para la producción de marihuana con fines recreativos. Debe asegurarse de elegir una variedad según sus necesidades.
2. Prepara el entorno
Una vez que hayas elegido la variedad adecuada para tu cultivo, es hora de preparar el entorno para que tu planta crezca. Necesitas una habitación limpia, ventilada y espaciosa con luces adecuadas para apoyar el crecimiento y la producción. Las luces especializadas para interiores también le ayudarán a conseguir los mejores resultados.
3. Sigue las instrucciones
Es importante que sigas las instrucciones para cultivar tu planta correctamente. Esto incluye la cantidad exacta de fertilizante, nutrición y agua que necesita la planta para crecer fuerte. Además, necesitas vigilar la temperatura y la humedad, así como cualquier problema de salud potencial que pueda presentarse durante el ciclo de vida de la planta.
4. Corta tu planta
Una vez que tu Mota esté lista para ser cortada, usa tijeras especializadas y sécala correctamente. Esto le permite obtener la mejor calidad de marihuana. Asegúrate de almacenarlo correctamente para preservar los olores y sabores únicos de esta hierba.
Últimos consejos
Cultivar Cannabis correctamente es un proceso con muchos factores influyentes. Por esta razón, es importante leer y educarse para entender los aspectos básicos del cultivo. Además, es importante mantener los equipos y la ubicación limpias para obtener los mejores resultados.
- Escoge la variedad adecuada para tu propósito.
- Prepara el entorno apropiadamente.
- Sigue las instrucciones del proceso de cultivo.
- Usa tijeras y seca la planta correctamente.
- Aprende y sigue buenas prácticas de cultivo.
¿Cómo nace una planta de mota?
El crecimiento de la planta de Cannabis se divide principalmente en las etapas de germinación de semillas, plántula, vegetativa y floración. Cada una tiene sus propias necesidades medioambientales y nutricionales, incluso diferentes fotoperiodos (horas de luz/oscuridad).
La germinación de la semilla comienza cuando se introduce a un ambiente con una temperatura templada (de 21-27°C) y se mantiene húmeda. La semilla absorbe el agua y rápidamente comienza a absorber los nutrientes de su medio ambiente; al cabo de unas pocas horas, la semilla germina y se abre para revelar un pequeño tallo y las primeras hojas. A partir de aquí, comienza el desarrollo de la planta, con la plántula creciendo y produciendo más hojas.
Durante la etapa vegetativa, la planta continúa creciendo para formar un bonito y robusto sistema de crecimiento con hojas grandes y ramificaciones. Las plántulas comienzan a tener un brillo intenso por el desarrollo de los tricomas (metabolitos secundarios).
En la etapa de floración, la planta comienza a producir los pequeños brotes de flores llamados cogollos, los cuales contienen la concentración máxima de cannabinoides. El tiempo de floración necesario puede variar entre 10 y 16 semanas.
Una vez recolectadas, las plantas se procesan para extraer sus cannabinoides deseados, se lavan, se curan y después se secan para crear motas de cannabis de la mejor calidad.
¿Cómo son las semillas de la mota?
La semilla de cannabis, conocido como «cañamón», es un fruto seco ovalado de tamaño muy pequeño, ronda entre los 3 y 4 mm de largo y 1,5 – 2 mm de ancho, recubierto de una membrana muy sutil que le confiere el aspecto atigrado que todos conocemos. Su color es café claro, con vetas más oscuras. La consistencia de la semilla puede ser algo dura, por lo que es una fruta muy resistente al transporte.
¿Cuánto tarda en cultivarse la mota?
Dependiendo de la genética utilizada, la duración de la floración puede variar completamente. Ya que en el mercado existen variedades índicas muy rápidas que están listas en 7 semanas y variedades sativa de gran pureza que pueden llegar a las 14 semanas, aunque la normal se establece en 9-10 semanas.
Cultivar Marihuana: Pasos a Seguir
Preparación
- Escoge la variedad de plantas de marihuana que desees cultivar. Se recomienda hacer una investigación para elegir la mejor variedad para tu área.
- El lugar para cultivar marihuana debe ser seguro y tener luz solar adecuada para el proceso.
- Preparar el sustrato para sembrar Las especies sativas necesitan un sustrato con un pH que varíe entre 5.5 y 6.5, mientras que las especies de cannabis indicas necesitan un sustrato con un pH 6.5 y 7.5.
- Prepara el espacio para cultivar. Utiliza maceteros de aproximadamente 16 litros de capacidad y colócalos en una superficie plana con abundante luz solar.
Sembrado de la semilla
- Coloca la marihuana en la superficie del sustrato y cubre con tierra.
- Riega ligeramente con agua pero con mucha cautela para no dañar la parte más frágil de la planta.
- Los maceteros se pueden colocar en un lugar iluminado con luz directa de sol.
- No permitas que la temperatura caiga por debajo de 15 grados.
- Mantén el macetero húmedo, aumentando la cantidad de agua cuando sea necesario.
Crecimiento y desarrollo
- Las semillas se germinarán en 3 a 5 días.
- Una vez germinada, la planta necesitará un mucho mayor cuidado.
- En este punto es importante regar la planta diariamente y asegurarse de que sea húmeda pero nunca encharcada.
- Espera entre 5 hasta 6 semanas para que tu planta de marihuana alcance su madurez.
- Durante este período el uso de fertilizantes orgánicos es fundamental para el correcto desarrollo de la planta.
Cosecha
- Espera a que tus plantas estén listas para la cosecha. Esto puede tomar entre 10 a 12 semanas desde el momento en que se plantan las semillas.
- Cuando estén listas podrás recolectar la marihuana.
- Coloca las hojas recolectadas en una zona ventilada para comenzar el proceso de secado y posteriormente curación.
- Una vez seca y curada podrás disfrutar tu marihuana como lo desees.
Conclusión
La marihuana es una planta que requiere cuidado y atención para obtener resultados satisfactorios. Cultivar marihuana no es cosa fácil, hay que monitorizar el proceso desde las semillas hasta la cosecha. Durante el proceso se es necesario tener mucho cuidado para el control de plagas, enfermedades y el crecimiento de la planta.