Cómo poner pasta térmica correctamente
Al realizar tareas simples de mantenimiento de computadoras, como la overclocking, poner pastas térmicas es necesario. Por lo tanto, es importante saber cómo poner la pasta térmica correctamente para asegurar una buena disipación del calor. A continuación, encontrará los pasos necesarios para realizar la aplicación correcta de la pasta térmica.
Paso 1: Prepare el procesador
Antes de aplicar la pasta térmica al procesador, debe retirar la placa calefactora y limpiar la superficie. Para hacer esto, primero afloje los tornillos (meciendo con cuidado para no romper los cables) y luego limpie la superficie con un paño suave empapado en alcohol isopropílico. Esto ayuda a eliminar la suciedad y cualquier resto de pasta térmica antigua.
Paso 2: Aplicación de la pasta térmica
Cuando se disponga a aplicar la pasta térmica, hay algunas cosas importantes a tener en cuenta:
- Tamaño de la gota: Use una gota de la pasta de tamaño de un grano de arroz para cada núcleo del procesador. Si está usando un procesador con un solo núcleo, use una cantidad de pasta un poco mayor del tamaño de un grano de arroz.
- Área de distribución: Una vez que la gota se encuentre en el centro del procesador, es necesario distribuir la pasta. Esto se logra mediante un movimiento de arrastre con un palillo de dientes húmedo, de tal forma que el material se extienda suavemente por la superficie.
- Cantidad: No exagere aplicando mucha pasta térmica, ya que no ayudará en la transferencia de calor. Lo ideal es usar una capa pequeña, pero uniforme.
Paso 3: Montaje del disipador
Una vez que se aplica la pasta térmica, coloque la placa calefactora encima del procesador y, con mucho cuidado, apriete los tornillos. Siempre asegúrese de que los tornillos estén apretados uniformemente y que no estén fuera de la interfaz del procesador. Esto es importante para evitar daños en el equipo.
Paso 4: Prueba
Para verificar si la pasta térmica se aplicó correctamente, abra el administrador de tareas para verificar si no hay sobrecalentamiento. Si el dispositivo se sobrecalienta, la pasta térmica puede necesitar reemplazarse o aplicarse de una manera diferente.
¿Qué pasa si no le ponemos la pasta térmica?
Por eso es indispensable contar con un buen sistema de refrigeración. Si no, el funcionamiento de la computadora se verá afectado. Podrían, incluso, llegar a quemarse esos componentes sobrecalentados. La pasta térmica es uno de elementos que ayudan a combatir las altas temperaturas de nuestras computadoras. La pasta térmica funciona como una interfaz térmica entre dos componentes, permitiendo la transferencia óptima del calor, impidiendo el contacto directo entre los componentes que provocaría el desgaste de éstos. Su función es reducir el calor generado por los componentes de la computadora y disiparlo.
¿Cuál es la mejor forma de poner pasta térmica?
La recomendación de los expertos Por ejemplo, según Intel la mejor forma de aplicar la pasta térmica es con la técnica de un punto, y el fabricante experto en refrigeración Arctic opina exactamente igual, pero por ejemplo los expertos en reparación de iFixit recomiendan la técnica de extender la pasta térmica. Esto significa que, dependiendo del contexto en el que se vaya a aplicar la pasta térmica, alguna de estas técnicas puede resultar adecuada, así que es mejor elegir la recomendación de los expertos de la marca de hardware en cuestión para asegurarnos del mejor resultado.
¿Cómo saber si la pasta térmica está bien puesta?
Un «truco» para saber si has puesto demasiada pasta térmica es que cuando colocas y aprietas el disipador en su sitio, encima del IHS del procesador, verás que la pasta térmica rebosa por los lados, indicio claro de que te has pasado de cantidad. Si los bordes están limpios y no hay pasta térmica visible a los lados es un buen indicio de que has asignado la cantidad adecuada. Además, si la fuerza de apriete es la correcta, deberías sentir una resistencia al apretar el disipador, algo entre suave y satisfactoria.
También, si el procesador se calienta demasiado a pesar de tener la pasta térmica en su ubicación, puede ser un indicio de que la pasta térmica no está bien puesta. En estos casos, la forma más segura de asegurarte de que la pasta térmica está bien puesta es desmontar el disipador con cuidado, volver a aplicar la pasta y volver a montarlo.