Consejos para quitar la resequedad de los pies
Tener una buena higiene y cuidado para las zonas más sensibles, como los pies, es esencial para una buena salud. Si has notado que tus pies se sienten ásperos y resecos, aquí hay algunos pasos y consejos para asegurarte de que se mantengan hidratados y suaves.
1. Limpia tus pies diariamente
Lavar los pies con agua tibia y un jabón suave es el primer paso para mejorar la suavidad y humedad de los pies. Limpia entre los dedos para prevenir la aparición de hongos, bacterias y malos olores. Después de lavar bien los pies, sécalos suavemente con una toalla.
2. Exfolia los pies
Debes exfoliar tus pies para eliminar las células muertas. Esto puede ayudar a que la zona quede suave y sin resequedad. Puedes usar una esponja suave con agua y jabón para exfoliar suavemente los pies. Esto debe hacerse 1 o 2 veces a la semana.
3. Aplica una crema hidratante
Aplicar una crema humectante o una pomada puede ayudar a hidratar la piel y prevenir la resequedad. Puedes utilizar estos productos después de la ducha un par de veces al día para mantener los pies hidratados. Busca una crema con ingredientes naturales. También puedes usar aceite de coco para mejorar la humectación de los pies.
4. Usa protección para tus pies
Usa zapatos cómodos que no sean demasiado estrechos para evitar la irritación de la piel. Evita los zapatos de tacón alto o de materiales sintéticos. Esto asegurará que tus pies respiren y se mantengan hidratados. Recuerda usar calcetines limpios y cambiarlos a diario.
5. Come alimentos nutritivos
Uno de los mejores consejos para prevenir la resequedad de los pies es comer alimentos ricos en nutrientes. Los alimentos como las frutas, verduras, semillas y frutos secos contienen muchos nutrientes que ayudan a la reparación de la piel y te mantiene hidratado. También puedes tomar una multivitamina para complementar tus necesidades nutricionales.
Algunos consejos adicionales:
- Usa calcetines de algodón: Estos te mantendrán los pies cálidos, secos y libres de bacterias.
- Bebe mucha agua: El agua te ayudará a hidratarte por dentro y por fuera.
- Usa almohadillas: Estas ayudan a prevenir la resequedad y la acumulación de células muertas.
- Usa un exfoliante de azúcar: Esto ayuda a remover la resequedad de la piel.
Si sigues estos consejos y usas tu propio sentido común para mantener los pies limpios y cómodos, notarás como los pies se vuelven suaves, humectados y más saludables.
¿Qué enfermedad produce resequedad en los pies?
El pie de atleta es una infección fúngica que provoca un sarpullido escamoso que genera picazón o ardor. El pie de atleta puede afectar a uno o a ambos pies. Los signos y síntomas comunes son los siguientes: Piel escamosa, agrietada o que se descama entre los dedos de los pies. Picazón excesiva y resequedad.
¿Cómo quitar la resequedad de los pies y talones?
Aplica una crema más espesa a base de aceite o con vaselina (Vaseline, ungüento curativo Aquaphor u otros), luego colócate un par de medias de algodón finas a la hora de dormir para ayudar a que el humectante haga efecto. Esto mantiene la humedad durante toda la noche. Por la mañana, lávate los pies con agua tibia y un jabón suave, haciendo especial énfasis en los talones donde la piel parece más seca. Cuando hayas terminado, sécalos bien con una toalla y aplica nuevamente la crema. Es recomendable hacer este proceso una vez al día para mantenerlos hidratados. Una vez por semana, puedes tomarte un baño de pies con sal marina o exfoliar la piel para eliminar la piel muerta acumulada.
Cómo Quitar la Resecedad en los Pies
Hay pocas cosas más incómodas que tener los pies resecos. Sentirse incómodo con los pies agrietados y descamados no sólo causa incomodidad, sino también dolor. Afortunadamente, existen formas de mejorar la resequedad de los pies.
Hidratar los Pies
Lo primero que debe hacerse para reducir la resequedad en los pies es hidratarlos bien. Para lograrlo, lávese los pies con jabón suave cada día. Después del baño, limpie suavemente la piel con una esponja suave, y evite frotar de forma excesiva, lo que podría agravar la resequedad.
Mantener los Pies Húmedos
Los pies deben mantenerse húmedos para prevenir la resequedad. Las medias pueden ayudar a retener la humedad en la piel, además de finanmente suavizar la piel agrietada. Además, utilizar una crema o loción con aloe vera o urea, un ingrediente que mantiene la piel hidratada, puede ayudar a mejorar un poco la resequedad.
Exfoliar los Pies
Exfoliar los pies con regularidad también ayuda a reducir la resequedad, eliminando la capa muerta de piel. Existen productos comerciales para exfoliar, también una mezcla espana y agrdable hecha con sal marina y aceite de oliva puede usarse para limpiar la piel muerta y descamada.
Hacerse un Pedicure
Hacerse un pedicure es una forma efectiva de mejorar la apariencia de la piel de los pies y prevenir la resequedad. Limpiar la piel y eliminar con una lima los bordes agrios aseguran que los pies quedan suaves y agradables al tacto.
Usar Un Tónico
Es posible usar un tónico natural para refrescar y suavizar los pies resecos. Para ello, mezcle un poco de vinagre blanco con agua fría y aplique en los pies usando algodón. Deje secar, y aplique la crema hidratante para los pies antes de asegurarse de que tienes los pies bien mojados.
Beneficios Adicionales
Es importante tener en cuenta los siguientes beneficios adicionales para reducir la resequedad en los pies:
- Tomar suficiente cabida
- No abusar de los jabones
- Usar cremas para los pies que contengan antioxidantes y ácido hialurónico
- Utilizar un humidificador de aire en casa
- Beber al menos 8 vasos de agua al día
Si sigue estos pasos, pronto volverá a tener los pies suaves y sin resequedad.