Cómo Saber Cuando El Pollo Ya No Sirve
Comprobar si el pollo se ha empezado a deteriorar puede ser simple si se tiene en cuenta una serie de indicadores:
Apariencia
Si el pollo presenta un color distinto al habitual, es un claro indicador de que el pollo ha sobrepasado su vencimiento. El pollo que se halla en mal estado presenta usualmente un color amarillento o grisáceo.
Olor
Un olor ligeramente ácido puede anunciar que el pollo está en mal estado. En caso de detectar este tipo de olor se recomienda descartar el producto.
Textura
Un pollo que presenta textura blanda y grasosa es un claro indicador de deterioro.
Sellado
Un empaque deteriorado o que presente cualquiera de los síntomas antes descritos.
Precauciones
Es importante tener en cuenta la temperatura a la que se conserva el producto para evitar cualquier fenómeno de deterioro. Algunas recomendaciones para mantener el pollo un tiempo prolongado son:
- Lavar y desinfectar con un desinfectante de uso alimentario.
- Cubrir con una bolsa con cerradura hermética.
- Mantener en el frigorífico entre 0 y 4 grados.
- Congelar el pollo para una mayor duración.
Es importante estar al tanto de la fecha de vencimiento y, en caso de dudas, descartar el producto para evitar consecuencias nocivas para la salud.
¿Qué pasa si me como un pollo en mal estado?
Si come carne de pollo que no está bien cocida, puede contraer una enfermedad transmitida por los alimentos, que también se llama intoxicación alimentaria. Además, se puede enfermar si come otros alimentos o bebidas que están contaminados con pollo crudo o sus jugos. La intoxicación alimentaria por lo general causa síntomas a corto plazo como náuseas, vómitos, diarrea, dolores abdominales y fiebre. Si no recibe tratamiento adecuado, pueden producirse complicaciones potencialmente graves. Por lo tanto, es importante no comer alimentos en mal estado para prevenir problemas de salud.
¿Cuánto tiempo puede durar un pollo en la nevera?
Según la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés), la carne de pollo cruda puede conservarse en el frigorífico de uno a dos días, mientras que si está cocinado puede mantenerse en la nevera hasta cuatro días. Se recomienda mantener la carne de pollo en un recipiente hermético para mantener los sabores y reducir el riesgo de contaminación cruzada.
¿Cómo saber si el pollo ya no sirve?
Si percibes un hedor agrio o similar al azufre, como a huevos podridos, tíralo. En torno a la textura, cuando el pollo está crudo debe ser brillante y blando. En ninguna ocasión debe ser pegajosa o viscosa. Si percibes un residuo baboso en tus manos después de tocarlo, indica que el pollo se ha echado a perder. Por otro lado, si al partirlo observas manchas de un color gris verdoso, es que se ha pasado el tiempo y no se recomienda su consumo.
Cómo Saber Cuándo el Pollo Ya No Sirve
1. Caducidad
Los pollos tienen una duración limitada. Es recomendable asegurarte de conocer el límite de caducidad para que sepas cuando consumir el pollo antes de que se pase de fecha y no lo comas. Si el pollo pasó de fecha, es mejor no consumirlo.
2. Mal Olor
El pollo fresco no suele tener un aroma desagradable, a menos que esté recomendado que se sazone con algún condimento. Si el pollo ya tiene un olor fuerte, entonces significa que ya pasó la fecha de caducidad.
3. Consistencia
La carne de pollo debe ser consistente al tacto. Si al tocarla sientes que se siente blanda o elástica, el pollo ya no sirve. Esto es una señal de que el pollo se está pudriendo y es mejor desecharlo.
4. Coloración
Para saber si el pollo ya no es comestible, debes mirar la coloración de la carne. El pollo fresco tiene un color rosa uniforme. Si notas que el pollo se oscurece o hay manchas oscuras, entonces esto significa que el pollo ya no se puede comer.
5. Beber Aguas Residuales
Almacenar el pollo en exceso puede generar líquido residual. Si esto sucede, el pollo ya no se puede consumir. Es posible que algunos de los componentes potencialmente dañinos se fusionen con el líquido y se encuentren en el pollo. Es mejor desecharlo.
Con estas señales en cuenta, deberías tener la habilidad de saber cuando el pollo no se debe comer. De lo contrario, puede poner tu salud en riesgo.