Como Vencer La Lujuria

Cómo Vencer La Lujuria

La lujuria es una tentación contra la cual la mayoría de nosotros hemos luchado en alguna etapa de nuestras vidas. A veces parece imposible controlar estos deseos y sentimientos, pero afortunadamente existen algunas estrategias que te ayudarán a vencer la lujuria y vivir una vida más sana y espiritualmente satisfactoria.

1. Busca ayuda

Es importante buscar ayuda profesional si la lujuria se está interponiendo en el camino de tu bienestar. Habla con un sacerdote o consejero sobre cómo supeditar sus deseos a los principios de la fe. Una psicoterapia cognitiva-conductual también puede ayudarte a identificar y seguir mejores patrones de comportamiento.

2. Reconócete

Es importante aceptar que tienes un problema de lujuria y no tratar de negarlo. Reconociéndolo, estarás en una mejor posición para hacer algo al respecto. Darte cuenta de que este deseo está dañando tus relaciones y/o tu relación con Dios te ayudará a abordarlo y a sobresalir.

3. Forja Nuevas Relaciones

Los deseos tienen la tendencia a alimentarse entre sí, así que es importante distanciarse de aquellas relaciones que te lleven a tentar el pecado. Esto significa buscar nuevas amistades, pasiones, actividades y espacios donde tengas menos probabilidades de caer en la lujuria.

4. Reafirma Tu Fe

Reafirmar tu fe puede ayudar a controlar los deseos pecaminosos y tomar el control de tu vida. Únete a un grupo de oración, lee la Biblia y ora diariamente para entender la dirección que Dios quiere para tu vida.

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5. Participa en Actividades Saludables

Participar en actividades saludables puede ayudar a distraerte de situaciones tentadoras y te ayudará a mantener tu mente y tu cuerpo enfocados en tu espiritualidad. Busca cosas como ejercicio, deportes o clases que te gusten para mantenerte ocupado y alejado de los deseos lujuriosos.

6. Usa la Tecnología a Tu Favor

Aunque la tecnología puede ser una tentación, también puede ser una poderosa herramienta para distanciarse de los deseos pecaminosos. Usa la tecnología para acceder a recursos como cursos de Autoayuda, podcasts de oración, historias y relatos esclarecedores y reflexiones espirituales.

7. Ten A Dios a Tu Lado

Ten a Dios a tu lado en tu lucha contra la lujuria. Cada día, recuerda que Dios te ama y te ha hecho con el propósito de gobernar tu deseo. Respira profundamente y pide ayuda cuando estés luchando. Finalmente, lee versículos bíblicos, reza y confiésate para fortalecer tu fe en el poder de Dios

¿Cuánto dura la lujuria?

La duración Otra diferencia esencial entre la lujuria y el amor es su duración. En la lujuria el interés por la otra persona es efímero, dura lo que se tarde en satisfacer la necesidad sexual, siendo dependiente de la intensidad del deseo que se esté sintiendo. Por el contrario, el amor romántico se caracteriza por ser eterno y duradero. No hay un límite específico para esta duración.

¿Cómo luchar en contra de los deseos sexuales?

Pero más allá de las consultas y los tratamientos con profesionales, existen algunas recomendaciones simples para combatir la inhibición del deseo, que se enumeran a continuación. Tranquilidad, Evitar el consumo de productos para aumentar el deseo, Cuidar la relación, Crear intimidad y propiciar las fantasías sexuales, Hacerse cargo de la parte emocional del acto sexual. Probablemente el consejo más útil sea el de retomar el placer, reconocer que no existen reglas al momento de disfrutar del sexo, ir aprendiendo sobre la propia sexualidad y los propios deseos con el objetivo de descubrir los intereses subyacentes.

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¿Cómo arrepentirse de la lujuria?

Eliminar la lujuria requiere de la oración sincera en la que pidamos a Dios que elimine esos sentimientos y otorgue, en su lugar, un amor benévolo (véase Moroni 7:48). Eso es posible, al igual que el arrepentimiento, mediante la gracia de la expiación de Jesucristo 7. Lorenzo Snow, un antiguo profeta de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, dijo una vez: “Todo pecado puede ser perdonado. El perdón completo se obtendrá solamente mediante la humillación del corazón, el arrepentimiento completo y una confesión sin reservas ante aquellos a quienes debamos confesar. A través de estos medios se obtendrá la restauración entera y la plenitud de la bendición del perdón”. Además de buscar un arrepentimiento completo y sincero por todos los actos del pasado, es importante tratar de evitar en el futuro toda lujuria. Esto se logra entrenando la mente para no entregarse a la fantasía y el enfoque del mundo moderno sobre el sexo. Al estudiar las Escrituras Santas y acercarnos a Dios mediante la oración diaria, espiritualmente nos fortalecerá y nos ayudará a resistir la lujuria en el futuro.

Otro consejo para arrepentirse de la lujuria es guardar los preceptos divinos. Si seguimos los principios del Evangelio, nuestra honradez, integridad y honestidad nos ayudarán a controlar nuestros sentimientos y deseos. Por medio de esto, nos acercamos más a Dios y a Sus Bendiciones, así como a una vida consagrada al servicio Divino y al amor celestial hacia otros. Finalmente, debemos mantenernos firmes en esos principios y no mirar hacia atrás. Como decía el salmista: «Ahora, pues, yo, Jehová, digo: ¿Volveremos atrás para apartarnos de mí? ¿Fuerza se ha de hallar en vosotros? Ciertamente seré hallado por vosotros, dice Jehová» (Jeremías 2:23).